La LEB Oro afronta la segunda vuelta de la segunda fase con muchas cosas por decidir... y con cosas ya decididas.
El sistema de competición de esta temporada no gustaba a nadie, aunque se ha asumido mayoritariamente que era el menos malo teniendo en cuenta las circunstancias especiales que rodean esta temporada.
En el tramo final de la primera fase vimos bastantes partidos sin nada en juego y ahora vamos a empezar a ver también partidos donde hay equipos que se juegan la vida y otros que no tienen nada en juego.
Más allá del propio sistema de competición, uno de los factores que más van a castigar a la emoción en estas próximas jornadas va a ser el hecho de que no haya ascenso directo para el campeón de la fase por el ascenso. No puede tener nunca la misma intensidad la lucha por un ascenso directo que por obtener un factor cancha en las eliminatorias. Eso es así.
A día de hoy, Río Breogán ya ha asegurado matemáticamente su puesto en los Playoff. En las próximas cinco jornadas los lucenses se juegan el puesto en el que llegan a los Playoff y eso tiene su importancia, por aquello del factor cancha, pero no podemos negar que es una importancia menor.
Además, este sistema de competición que repesca para los Playoff al líder del grupo por la permanencia está bien porque anima mucho ese grupo, pero ofrece un 'regalo envenenado' al que quede líder del grupo por el ascenso.
La pregunta es: Es mejor ser líder y jugar contra un equipo que llega en una dinámica ganadora desde el grupo por la permanencia, o es mejor ser segundo y jugar contra el 7º clasificado de la lucha por el ascenso. Yo no tendría clara la respuesta.
La primera vuelta en la fase por el ascenso ha dejado muy definida la lucha por los Playoff. Almansa se ha quedado ya casi sin opciones. Palencia lo tiene también complicadísimo y Valladolid está en una dinámica que no parece que le haga fácil remontar posiciones.
Dentro de un par de jornadas es más que probable que entre 5 y 7 equipos ya hayan definido su clasificación para los Playoff y 'solo' se jugarán factor cancha en las últimas jornadas. Ese factor cancha es un 'premio' menor y es posible que alguno de esos equipos pueda reservar a algún jugador tocado de cara a Playoff en los últimos partidos.
La lucha por la permanencia se presenta mucho más emocionante. Vamos a vivir jornadas dramáticas con equipos históricos jugándose su futuro. En este grupo ya tenemos a Canoe descendido y no es descartable que incluso algún jugador pueda salir del equipo, debilitando aún más al equipo madrileño. Tizona también puede perder sus opciones si cae esta semana ante Huesca.
El resto de equipos se van a batir el cobre por la permanencia y uno de ellos se va a llevar el premio de ser repescado para luchar por el ascenso. Mucha atención a esa repesca de un equipo en dinámica ganadora, porque pueden sorprender al líder del grupo por el ascenso y dinamitar los Playoff.
Llegan jornadas muy interesantes. Un sistema de competición extraño que nos ofrece una mezcla de finales con partidos sin mucha trascendencia.
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