Sin caer en el triunfalismo fácil, ya que el liderato a estas alturas de liga tiene el valor que tiene, lo cierto es que ha llegado acompañado de unas sensaciones distintas a las que daba el equipo el año pasado.
Un liderato que se ha basado en una gran defensa y un equipo solidario en la cancha, sin grandes alardes de individualismo pero con múltiples opciones en ataque, y con un estandarte como Martynas Andriuskevicius, un jugador que si mantiene esta línea, el año que viene estará a buen seguro en la ACB (ojalá que en el Lucentum).
Otro factor importante que diferencia esta temporada es la ausencia de un "outsider" en la categoría, este año se presenta todo más igualado, no partimos con un CAI o un Bruesa, que, independientemente de su juego, sólo por nombres de jugadores y presupuesto metían miedo, y al final se llevaron el gato al agua. Este año hay muchos equipos que estamos en un margen más igualado, eso unido a algunas revelaciones que van a dar muchos sustos como Clínicas Axarquía, Burgos o Cáceres.
Al final el objetivo es el ascenso directo y de momento vamos por el buen camino, tres victorias menos que nos quedan. A pesar de eso no hay que bajar el nivel ni un milímetro, y hay que ir confirmando esa posición jornada a jornada y que sean los rivales los que se enfrenten a nosotros con la presión en el cogote.
Próximo rival, Breogán, el que a priori se daba como gran favorito y que llega a Alicante con una derrota a cuestas y a jugarse un importante partido ante un Lucentum motivado, con una afición animada y con ganas de seguir arriba.
Diario Las Provincias: El Lucentum, líder de la LEB Oro
Diario La Verdad: Bola extra
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