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Voy a poner aquí algunos extractos que me han llamado la atención de sus palabras:
Sobre la pareja de bases Berni-Llompart y el posible refuerzo en esa posición:
«A mí me valen los dos, pero si el club entiende que hay posibilidad de mejorar esa posición, yo no me voy a poner en contra. Lo que yo quiero es el mejor equipo posible, pero no estoy de acuerdo en la afirmación de que nuestros directores de juego del año pasado no valgan para jugar en la ACB»
Quintana se reafirma en la confianza en la pareja de bases del ascenso, y, al igual que él no está de acuerdo con la gente que piensa que la pareja Berni-Llomparta no vale para ACB, yo creo que aunque valga para jugar a ACB, no es una pareja que garantice no pasar problemas en esa posición, pero como todo, para gustos, colores.
Sobre la llegada de Arturo Álvarez:
«La llegada de Arturo la decidió el club y luego me la comunicó pertinentemente a mí el 12 de junio. Me dieron sus razones, me dijeron que iba a ser un hombre del club y yo no tengo por qué valorarla porque es un decisión tomada por la comisión deportiva. No va a ser la primera vez que trabaje codo con codo con alguien. No tengo ningún problema en valorar de forma conjunta con él y con el resto de la comisión las posibles incorporaciones. Tenemos que debatir y consensuar que es lo mejor para todos por el bien de la entidad. Tienen que ser decisiones justas, decisiones con las que todos estemos de acuerdo, porque si no es así, no estaremos avanzando nada»
Unas palabras algo frías y distantes hacia el que va a ser su ayudante y hombre más cercano en la planificación de la plantilla. No me deja muy tranquilo el tono.
Sobre quién va a decidir las incorporaciones opina:
«No se va a poder fichar a alguien si yo no quiero al jugador y no se va a contratar a nadie si tú (por la comisión deportiva) tampoco lo quieres. En pocas palabras, todas las partes tendrán derecho a veto. No creo que este sistema ralentice las negociaciones, pero es evidente que si no quiero de ninguna manera a un jugador o viceversa, la comisión no ve factible a otro que a mí me gusta, pues lo desechamos, y punto. Sólo eso. Tiene que funcionar como última medida, no como el veto de la ONU»
Ese derecho a veto al que hace mención a que él está al mismo nivel de decisión que la comisión deportiva, deja claro que no habrá ninguna imposición en ningún sentido.
Veremos a ver como acaba todo ésto, pero lo cierto es que Quintana está ganando protagonismo y se está erigiendo en la pieza clave que va a tomar decisiones, por encima de un Arturo Alvárez del que poco se ha sabido sobre sus gestiones y por encima del club, ya que ha dejado bien claro que si él no quiere de ninguna manera a un jugador no se fichará.
Voy a poner aquí algunos extractos que me han llamado la atención de sus palabras:
Sobre la pareja de bases Berni-Llompart y el posible refuerzo en esa posición:
«A mí me valen los dos, pero si el club entiende que hay posibilidad de mejorar esa posición, yo no me voy a poner en contra. Lo que yo quiero es el mejor equipo posible, pero no estoy de acuerdo en la afirmación de que nuestros directores de juego del año pasado no valgan para jugar en la ACB»
Quintana se reafirma en la confianza en la pareja de bases del ascenso, y, al igual que él no está de acuerdo con la gente que piensa que la pareja Berni-Llomparta no vale para ACB, yo creo que aunque valga para jugar a ACB, no es una pareja que garantice no pasar problemas en esa posición, pero como todo, para gustos, colores.
Sobre la llegada de Arturo Álvarez:
«La llegada de Arturo la decidió el club y luego me la comunicó pertinentemente a mí el 12 de junio. Me dieron sus razones, me dijeron que iba a ser un hombre del club y yo no tengo por qué valorarla porque es un decisión tomada por la comisión deportiva. No va a ser la primera vez que trabaje codo con codo con alguien. No tengo ningún problema en valorar de forma conjunta con él y con el resto de la comisión las posibles incorporaciones. Tenemos que debatir y consensuar que es lo mejor para todos por el bien de la entidad. Tienen que ser decisiones justas, decisiones con las que todos estemos de acuerdo, porque si no es así, no estaremos avanzando nada»
Unas palabras algo frías y distantes hacia el que va a ser su ayudante y hombre más cercano en la planificación de la plantilla. No me deja muy tranquilo el tono.
Sobre quién va a decidir las incorporaciones opina:
«No se va a poder fichar a alguien si yo no quiero al jugador y no se va a contratar a nadie si tú (por la comisión deportiva) tampoco lo quieres. En pocas palabras, todas las partes tendrán derecho a veto. No creo que este sistema ralentice las negociaciones, pero es evidente que si no quiero de ninguna manera a un jugador o viceversa, la comisión no ve factible a otro que a mí me gusta, pues lo desechamos, y punto. Sólo eso. Tiene que funcionar como última medida, no como el veto de la ONU»
Ese derecho a veto al que hace mención a que él está al mismo nivel de decisión que la comisión deportiva, deja claro que no habrá ninguna imposición en ningún sentido.
Veremos a ver como acaba todo ésto, pero lo cierto es que Quintana está ganando protagonismo y se está erigiendo en la pieza clave que va a tomar decisiones, por encima de un Arturo Alvárez del que poco se ha sabido sobre sus gestiones y por encima del club, ya que ha dejado bien claro que si él no quiere de ninguna manera a un jugador no se fichará.
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