El HLA Alicante encadenó su tercer triunfo consecutivo como local y sigue consolidando su mejoría tras imponerse a un Monbus Obradoiro que no puso las cosas fáciles y que llegó a dominar por más de 10 puntos de diferencia en la primera mitad.
Analizamos algunas de las claves del partido:
KEVIN LARSEN, CADA DÍA MÁS DOMINANTE. El pívot danés se ha convertido en la piedra angular del juego del equipo. Cada jornada se le ve mejor físicamente y con una mayor confianza en su juego. También está siendo clave el hecho de que ahora el juego del equipo sí que saca partido de todas las virtudes del juego de Larsen. Recibe cada vez más balones en el poste bajo, donde es capaz de finalizar con sus buenos movimientos y de atraer ayudas para luego abrir el juego a otros compañeros. También está siendo muy bien utilizado en el poste alto con sus bloqueos para facilitar el juego del perímetro y permitiendo amenazar con su tiro exterior para hacer que sea difícil defenderle.
JORDAN KING, EL RESUCITADO. Lo de la metamorfosis de este jugador con la llegada de Perelló al banquillo es digno de estudio. Ha recuperado toda la confianza en su juego desde que se le ha ubicado en la posición de escolta. Está encadenando actuaciones estelares y ayer, además, le vimos en la faceta de killer en los momentos calientes, decidiendo el partido con dos triples espectaculares.
CONFIANZA CONTAGIOSA. La buena dinámica del equipo ha hecho que las caras de los jugadores hayan cambiado. Hay más alegría en la cancha, los jugadores ven que el equipo crece, que los sistemas generan mejores situaciones para todos y esto hace también que otros jugadores estén mejorando su rendimiento y confianza. Mwema, Alex López, Roger Moute o el propio Adrià están mejorando la fiabilidad de su juego y de su aportación ofensiva.
EFECTO PERELLÓ. Un detalle curioso del partido de ayer es el hecho de que los cinco mejores jugadores del equipo fueron jugadores que están en la plantilla desde el inicio de la temporada: King, López, Moute, Mwema y Larsen. Todos los nuevos fichajes, salvo Rosa (2) valoraron ayer en negativo (Aris, Kacinas y Llorente). Esto es meritorio porque demuestra que los nuevos fichajes llegan para dar equilibrio y reconstruir una plantilla que estaba muy mal diseñada, y que su llegada también ha servido para que el juego colectivo haya mejorado lo suficiente para que su aportación no sea imprescindible para los triunfos. En este punto hay que poner en valor la labor de un Rubén Perelló que ha recuperado la mejor versión de jugadores que estaban totalmente perdidos en el equipo. El último ejemplo ha sido un Gonzalo Bressan que ayer dejó buenos minutos en su rol de pívot.
SENSACIONES POSITIVAS. La victoria de ayer supone un paso más en el crecimiento colectivo del equipo. El triunfo de ayer tiene muchas lecturas positivas que deben servir para que el equipo dispare su confianza. Se consiguió ganar a un equipo llamado a la luchar por el ascenso. Se logró remontar un mal arranque de partido. Se ganó ante un pabellón que presentaba una afluencia de cerca de 4000 personas que vieron que este equipo vuelve a tener garra, entrega y que transmite compromiso. Se supo cerrar un final apretado de partido y se transmitió,por primera vez en la temporada, la sensación de que el equipo no se iba a arrugar.
Con el triunfo de ayer, el equipo afronta ahora dos auténticas finales para cerrar la primera vuelta. Esta semana se visitará a Castelló, antes de recibir a Morón y cerrar la primera vuelta. Dos duelos ante rivales directos que deben servir para confirmar la buena dinámica del equipo.
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