La temporada 2001-02 supuso el regreso a la ACB del Lucentum Alicante, un año después de perder la categoría tras haber ascendido por primera vez en su historia la temporada 1999-00.
En su nuevo proyecto en LEB, el club alicantino tenía nuevo presidente (Luis Castillo) y se armó un ambicioso proyecto que se puso en las manos de Julio Lamas. El entrenador argentino apostó por Pablo Prigioni para acompañar a David Gil en la dirección de juego. Y luego sumó dos piezas más llegadas desde el exitoso equipo del Estudiantes de Olavarría: Byron Wilson y Víctor Baldo.
Precisamente el pívot argentino fue uno de los protagonistas de aquella temporada y ha recordado para el artículo aquella intensa temporada.
Baldo recuerda sobre su llegada a Alicante que "me llegó la oferta de Alicante y sabiendo que Julio Lamas era quien iba a guiar el proyecto me hizo decidirme por aceptar aunque tuve otras ofertas, de ACB incluso". Víctor añade que "yo siempre tuve en cuenta mis grandes capacidades y mis limitaciones, y quería que el entrenador me conociera. Cuando fiché ya sabía que habían hablado con Byron Wilson, que fue compañero mio en Olavarría y yo sabía que era un gran jugador para el equipo".
VÍDEO: Partido que enfrentó a Estudiantes Olavarría y Vasco da Gama, con Baldo y Wilson en las filas del equipo argentino:
VÍDEO: Partido que enfrentó a Estudiantes Olavarría y Vasco da Gama, con Baldo y Wilson en las filas del equipo argentino:
Aquel equipo tenía una pareja interior formada por Víctor Baldo y Anthony Douglas, El jugador argentino apunta que "al principio, no estaba convencido de que Douglas y yo fuéramos a complementarnos bien. Sin embargo, pronto se notó lo bien que rendía Douglas cerca del aro y me sorprendía la facilidad con la que finalizaba".
Sobre la llegada de Prigioni al proyecto, Víctor recuerda que "Pablo se había jugado mucho cuando se fue a probarse en Fuenlabrada para ganarse un hueco en ACB y el hecho de ir a LEB era un reto. Recuerdo que me dijo 'yo sé que donde tú estás las cosas funcionan bien y voy a ir a tope y con Lamas nos va a ir bien'".
Baldo también recuerda al resto del grupo: "David Gil, Chema Moreno, Manu Gómez, Héctor García, cuando nos coordinamos la convivencia se hizo superbien y hubo una unión muy especial entre todos".
Baldo también recuerda al resto del grupo: "David Gil, Chema Moreno, Manu Gómez, Héctor García, cuando nos coordinamos la convivencia se hizo superbien y hubo una unión muy especial entre todos".
El ascenso se iba a decidir en la eliminatoria decisiva ante un Ourense que era favorito. Baldo apunta que "Ourense tenia un equipazo con Santi Aldama, Juanjo Bernabé, Kammerichs... y empezaron jugando a un nivel alto desde principio de temporada. A nosotros nos costó a principio de temporada pero el equipo se fue acoplando y se vio que el equipo nuestro iba a ser ganador".
La serie final se puso a favor de los alicantinos tras ganar los dos primeros partidos en Ourense. De cara al tercer partido en Alicante Víctor recuerda que "sabíamos que ese era el partido decisivo". Aquello acabó con el triunfo y Baldo recuerda que "hubo una celebración increíble, porque el hecho de ascender era devolverle mucho a la ciudad. Fue grandioso".
Con el regreso a la ACB, Alicante volvío a vivir una gran temporada el año siguiente con momentos inolvidables como cuando el equipo se quedó a un paso de meterse en la Copa tras un partido clave perdido en la cancha del FC Barcelona. De aquel partido Víctor Baldo recuerda que "llegamos al último balón con posibilidades. Recuerdo que fui a buscar un rebote y Fucka me dio un golpe en toda la cara cuando me giraba para pasarle el balón a Uri (Junyent). Me giré al árbitro y lo miré como diciendo 'esto es un escándalo'."
De aquella plantilla histórica del Lucentum ACB 2002-03, Baldo recuerda que "aquel año sacamos lo mejor de cada uno. Perasovic era un jugador de los que se cuentan con los dedos de una mano. Él anotaba o sabía como sacar la falta al rival en el momento exacto. Y luego teníamos a Lou Roe, que tenía una gran explosividad y una gran capacidad atlética. Si Lou tenía espacio te reventaba."
Baldo termina destacando que "para mí Alicante significa muchísimo y todavía sigo recordando con amigos lo que vivimos en aquella etapa".
De aquella plantilla histórica del Lucentum ACB 2002-03, Baldo recuerda que "aquel año sacamos lo mejor de cada uno. Perasovic era un jugador de los que se cuentan con los dedos de una mano. Él anotaba o sabía como sacar la falta al rival en el momento exacto. Y luego teníamos a Lou Roe, que tenía una gran explosividad y una gran capacidad atlética. Si Lou tenía espacio te reventaba."
Baldo termina destacando que "para mí Alicante significa muchísimo y todavía sigo recordando con amigos lo que vivimos en aquella etapa".
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