Guillem Arcos, el 'hasta luego' del canterano querido por todos en Alicante

Esta semana la actualidad del Lucentum ha estado marcada por la despedida de Guillem Arcos después de toda una vida vinculado al club. 

Guillem se despedía con una carta de despedida en la que recordaba lo especial que ha sido para él esta etapa de 11 años vinculado al Lucentum. Nos podemos quedar con ese último párrafo en el que dice que "esta despedida no será un adiós definitivo, sino un hasta luego". Ojalá sea así y que este nuevo rumbo que ahora empieza le sirva para seguir creciendo y disponiendo de más confianza y minutos que le permitan desarrollarse y, ojalá, vuelva a permitir que su camino se encuentre con el del Lucentum.

La huella que Guillem deja de todo su paso por Alicante se refleja en los innumerables mensajes cargados de bonitas palabras para un jugador que deja huella no solo en la cancha sino también en el trato humano y como compañero. 

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El 2 de octubre de 2016, el partido ante Basket Navarra supuso el debut en competición oficial de Guillem Arcos. El jugador se convertía así en el más joven de la historia en debutar con el Lucentum. Arcos lo hizo con 16 años y 40 días y le arrebata ese hito a otro compañero de equipo, Miki Ortín, que debutaba la temporada 2013-14 con 16 años y 285 días.

Guillem Arcos forma parte de la generación 2000 de la cantera del Lucentum. Quizás la que más éxitos y mejores jugadores ha ofrecido en la historia del club. En 2014 firmaron un exitoso Campeonato de España, llegando a cuartos de final y quedando entre los 8 mejores de España.

En estas últimas temporadas, la presencia de Guillem en el primer equipo se ha ido consolidando y hay ido ganando relevancia, pero siempre desde un rol complementario y sin acabar de tener nunca la confianza y continuidad necesaria para dar un salto de calidad en su juego.

Con su ya anunciado fichaje por Melilla, va a encontrarse de nuevo con un entrenador que lo conoce bien, como es Rafa Monclova y que seguro que le ha puesto sobre la mesa un rol y una confianza que la hace tomar una decisión que, a buen seguro, no ha sido nada fácil para Guillem.

Ser el jugador de la casa y el referente salido de la cantera del club está muy bien, pero también tiene sus desventajas. Es muy bonito ser ese espejo en el que los jugadores de la cantera se puedan mirar, pero también estoy convencido de que en muchas ocasiones eso no se valora tanto a otros niveles. Para un jugador como Guillem está la opción de no salir de tu zona de confort y apostar por una continuidad a largo plazo en un club donde, dependiendo de muchas circunstancias, puedes tener más o menos relevancia en el equipo o apostar por dar un salto a otro club, a un entorno nuevo y vivir situaciones que, en lo positivo y en lo negativo, te van a servir para crecer y evolucionar.

Ojalá que le vaya genial a Guillem y que podamos verle disfrutar y crecer esta temporada.

GUILLEM ARCOS es nuevo jugador del Club Melilla Baloncesto. El base-escolta nacional se une al proyecto melillense y queda ligado al club por una temporada. En su anterior club, la pasada temporada registró un promedio de 4.7 pts, 1.5 ast, 1.1 reb.

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— Club Melilla Baloncesto (@melillabcto) August 24, 2023