Foto: Jose Fco. Martínez |
Nadie dijo que esto iba a ser fácil. Aunque después de 20 victorias en 21 partidos parece mentira que el ascenso no esté ni mucho menos asegurado. Esto también es mérito de un Villarrobledo que está haciendo historia y que está lejos de mostrar señales de debilidad.
Ayer, Villarrobledo destrozaba a un Zamora que se jugaba mucho pero que apenas mostró oposición ante un equipo manchego que sigue en una dinámica ganadora tremenda. Villarrobledo es un rival temible. Tienen a Jalen Nesbitt, que es uno de los mejores jugadores de la liga, pero es que ayer Nesbitt solo anotó 6 puntos y tampoco significó que Villarrobledo bajara sus prestaciones.
El próximo sábado recibimos a Navarra en una penúltima jornada con horario unificado, lo que significa que Villarrobledo juega a la misma hora ante Juaristi ISB. Si gana HLA Alicante y pierde Villarrobledo podríamos celebrar el ascenso en el Pedro Ferrándiz. Aunque, visto lo visto, todo apunta a que lo más probable sea que todo se acabe decidiendo en la última jornada.
Los resultados de la jornada de ayer hacen que el escenario de estas dos últimas jornadas pueda ser complejo. Hace unas semanas parecía que Marín no se jugaría nada en la última jornada, algo que podría ser beneficioso si el Lucentum tuviera que jugarse allí el ascenso. Sin embargo, Marín sorprendió ayer ganando a Murcia y enganchándose a la lucha por el ascenso. Además, la semana que viene visita a un Azuqueca que no se juega ya nada, con lo que en caso de victoria gallega se aseguran llegar al partido ante HLA Alicante de la última jornada jugándose el ascenso. En esa última jornada, Villarrobledo visita a un Basket Navarra que parecía seguro que se jugaría la vida, pero dependiendo de lo que pase esta semana podría llegar incluso sin opciones a esa última jornada.
Al final, todo esto son cálculos, cuentas e hipótesis que no sabemos cuánto van a influir. Lo único que sabemos seguro, y es lo más importante, es que somos los únicos que dependemos de nosotros mismos y que hemos visto como este equipo sabe mantener la templanza en momentos complicados.
Este sábado nos visita un Navarra obligadísimo a ganar y eso equipara el nivel de ansiedad o presión que pueda sufrir cada equipo, con lo que en esa situación deberíamos saber sacar el partido adelante.
Tengamos confianza en este equipo porque no nos ha fallado todavía. Además, tengan ustedes en cuenta de que, al fin y al cabo, jugamos con red, porque en el peor de los casos nos quedará la opción de la eliminatoria de ascenso (aunque no quiero ni pensarlo).
Al final, lo que nos va a dar el éxito va a ser la comunión total entre todo el equipo, y del equipo con la afición. Como pequeña muestra aquí os traigo el vídeo de la presentación del equipo en el último partido. Desde el primer empujón entre los jugadores hasta el último saludo de Javi Furio hacia la Kali Nord, creo que representa lo que es el Lucentum de este año. Un EQUIPO.
Nadie dijo que fuera fácil ascender. No lo fue el primer ascenso ante Lleida teniendo que remontar en la segunda mitad. No lo fue el segundo ante Ourense. Tampoco fue fácil ganar a Melilla en la Final a 4 de Fuenlabrada. Para ascender en Andorra tuvimos que sufrir una eliminatoria de 5 partidos durísimos y jugarnos la vida a 800 kilómetros. Hasta el ascenso a EBA se acabó decidiendo en los últimos segundos ante Alfàs. También es cierto que por en medio quedan decepciones como las vividas ante Valladolid o Canoe, pero esto es baloncesto.
Solo hay que creer, confiar y apoyar mucho.
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