Hablando de los bases

Interesante artículo el que publica Pedro Rojas en el Diario La Verdad, me gusta la última frase:



El Lucentum va quemando jornadas, dejando muchas cosas claras y sembrando alguna que otra duda. Quim Costa tiene previsto llevar su filosofía de baloncesto hasta las últimas consecuencias. Pese a ello, la puesta en escena puede variar en Burgos por culpa de la evidencia: Dumas pide paso. El base francés firma mejores números que Fisher pese a disponer de menos minutos y a no haber sido titular todavía.



El director de juego norteamericano, con su marchamo ACB, ha experimentado un notable bajón en su juego cuando todo apuntaba a que era el maestro de ceremonias perfecto para la puesta en escena que defiende Costa. De más a menos, de ordenar y mandar a generar desconcierto. Eso le ha ido restando minutos sobre el parqué, ha pasado de promediar 25 a los 15 de la actualidad.



La coyuntura ha obligado al preparador catalán a contar con Dumas cada vez más. Salvo el día de Zaragoza, el galo ha dado la talla, ha sido capaz de templar en medio del desenfreno general.



Con los números en la mano, el cerebro francés dobla en valoración a su compañero (80 a 40). Pero no es en lo único. También asiste mucho más que el base nacionalizado español (41 por 18), pierde menos balones (15 a 18) y recibe más faltas (21 a 13), tal vez porque protege mejor el balón y se deja ver más por dentro cuando la circulación se atasca.



Son diferentes, ni mejor, ni peor, uno más temperamental (el americano) y otro más contenido (el francés), pero también es verdad que la lógica obliga a recompensar a quien te brinda mejores minutos.



Quim Costa no quiere bombardear a los suyos con sistemas nuevos, quiere introducirlos de forma gradual para llegar al tramo final de temporada, ese en el que se decide el futuro, al 100% a nivel táctico. Y ahí debe crecer Dumas, que está demostrando que también sabe correr y montar el contragolpe. Física y Química, Josh y Stephane... pero titular solamente puede serlo uno.