Entrevista a Miguel Cano en el Diario La Verdad

ENTREVISTA Y FOTOGRAFÍA EXTRAÍDAS DE DIARIO LA VERDAD

Miguel Cano, presidente del CB Lucentum hace balance de un año que trajo consigo la desilusión de no lograr el objetivo del ascenso a la máxima categoría del baloncesto nacional, aunque se muestra optimista de cara al 2009.

-Cómo afronta su segundo año como presidente del Lucentum?

-Tengo el mismo reto que el año pasado, siempre hay dificultades distintas pero teniendo en cuenta que es un equipo de baloncesto nuestra meta siempre es conseguir lo máximo. Con ilusión y esperanza de alcanzar el ascenso.

-La temporada pasada dio a entender que dimitiría si no lograba el ascenso, ¿opina lo mismo de ésta?

-Sí, creo que Miguel Cano no puede eternizarse en el puesto y me gustaría que hubiera muchos candidatos, gente que de verdad tuviera ganas de trabajar y viniera al club y nos mostrara ese interés. El año pasado, cuando no logramos el ascenso y no conseguimos resolver todos los temas económicos que arrastrábamos del pasado, aconsejé al consejo de administración que sería bueno buscar a otra persona pero evaluaron todo el trabajo y estimaron oportuno que debíamos seguir al frente un año más y así lo hemos hecho.

-¿Qué es lo mejor y lo peor de ser presidente del Lucentum?

-Lo mejor es que trabajas en lo que te gusta con la ilusión que tienes por este club desde una posición que te permite marcar un poco las pautas, y lo peor es que debido a la situación económica que arrastra el club el día a día es muy difícil. A veces te planteas si merece la pena seguir trabajando para tapar historias del pasado que te desvían del camino y de la lucha por conseguir los objetivos de la temporada, y eso a veces te condiciona y te quita la ilusión.

-¿Cree que asume más labores dentro del club de las que le debería como presidente?

-No, cada club tiene su metodología de trabajo y eso también es un San Benito que se cuelga a la figura de Miguel Cano. Ya me gustaría a mí tener muchas personas para delegar, ya me gustaría tener un presupuesto que me permitiera contar con cinco personas más en la estructura del club. A nivel de comisión ejecutiva hay más personas que trabajan en el día a día y no se les valora lo suficiente lo que aportan a este club.

-¿Hay mejores condiciones esta temporada para lograr el ascenso directo a la ACB?

-Las condiciones para lograr el ascenso son idóneas, el equipo es competitivo, la implicación de los jugadores es total, pero eso no quiere decir que el año pasado no lo fuera. Teníamos una plantilla a priori de garantías, dentro de que esto es un deporte y puede pasar cualquier cosa. Tuvimos muchos altibajos y aún así llegamos a la final four con todas las opciones y, en dos minutos para olvidar, lo estropeamos. Esta temporada esperemos que no nos ocurra lo mismo y, aunque somos optimistas, hay que tener los pies en el suelo.

-¿Cerrar el año siendo líderes da confianza respecto a conseguir el objetivo?

-Hace unas jornadas parecía que lo teníamos todo hecho y tres derrotas consecutivas y el mal juego en esos partidos nos llevaron a la realidad en esta competición. Es una Liga muy igualada y hay muchos equipos con los mismos objetivos que nosotros con presupuestos incluso superiores al nuestro, y eso nos hace ser prudentes y pensar que como no sigamos trabajando partido a partido y como no nos volquemos pueden venir momentos difíciles.

-¿Está satisfecho con el rendimiento de la plantilla hasta ahora?

-Sí, porque las plantillas no sólo tenemos que evaluarlas en la pista. Está claro que lo que trasciende al exterior, a la afición, es el juego y el equipo ha sido líder y eso importante, pero nunca podemos cuestionar la dedicación de esta plantilla tanto dentro como fuera de la pista y en ese sentido estoy contentísimo.

-¿Se plantea hacer algún refuerzo para afrontar la segunda vuelta?

-Para evitar malos entendidos y la situación del año pasado, dejamos claro que una vez conseguidos los jugadores que teníamos y estando satisfechos con las incorporaciones, si no era por una lesión importante no hablaríamos de refuerzos hasta días antes de cerrar la contratación de jugadores que es a finales de febrero. En ese momento nos plantearemos la situación deportiva y económica del club y tomaremos una decisión.

-¿Podría el Lucentum asumir otro año en LEB Oro?

-Para un equipo que ha saboreado lo que es jugar las mejores competiciones en España y ha conseguido jugar en Europa, mantener un proyecto en LEB es difícil a nivel económico y deportivo por la ilusión que volveríamos a truncar de todos los aficionados, pero es un deporte y tenemos que mentalizarnos de que hay que seguir luchando estemos donde estemos. Si no logramos ascender seguro que el consejo de administración hará un planteamiento para que este proyecto no decaiga.

-¿Y un ascenso a la ACB tal y como está la economía del club y del país?

-Somos conscientes de que para sanear el club de cara al futuro regreso a la ACB tendríamos que hacer otro esfuerzo, estamos trabajando en reducir la deuda del club y seguro que a final de esta temporada la imagen económica será mejor que la que presentamos hace dos años. Ahí llegará el momento de que toda la sociedad alicantina se involucre con el proyecto.

-¿Cómo es la situación económica del club en este momento?

-No es buena porque este año, debido a la crisis, hay empresas que huyen de los patrocinios y de las ayudas y nos está costando mucho. Ya confeccionamos un presupuesto a la baja que es casi 800.000 euros inferior al de la temporada pasada y aún así quedaban partidas pendientes de resolver. Es una realidad que nos condiciona mucho el día a día.

Renovaciones

-Muchos jugadores tiene la opción de renovar si logran el ascenso, ¿es una manera de implicarlos en el objetivo?

-Cuando estás confeccionando una plantilla hay veces que no puedes ofrecer dinero y ofreces estabilidad a los jugadores. El año pasado hubo jugadores que no conseguimos traer porque querían asegurar su presencia en ACB. Este año, un argumento que hemos empleado con algunos jugadores es que si el año que viene estamos en ACB el club contará con ellos y eso les ha animado a firmar con nosotros a pesar de que tenían ofertas de clubs de ACB.

-¿Qué diferencias observa entre el equipo del año pasado y el del actual?

-Mucha implicación. El año pasado teníamos algunos jugadores cedidos que eran importantes en nuestro proyecto y a la larga se notaba que al final de temporada retornarían a sus clubes con sus contratos firmados a largo plazo. También en los resultados, porque antes éramos capaces de lo mejor y de lo peor, no teníamos una línea de regularidad que este año sí que hemos alcanzado. Pero está claro que las victorias ayudan a que todo vaya mejor.

-Pese a que el Lucentum es líder prácticamente toda la temporada el Centro de Tecnificación no parece atraer a más público. ¿Qué se necesita para conseguirlo?

-No hemos conseguido igualar el número de abonados de la temporada pasada tal vez porque que para muchos de nuestros aficionados el no lograr el ascenso significó un pequeño fracaso o una desilusión y eso les ha llevado a alejarse de nuestro proyecto. Aunque por otra parte, la gente se implica más con el equipo, el Centro de Tecnificación vuelve a ser ese pabellón con magia al que los rivales venían un poco cohibidos por el apoyo de la afición y los gritos. Solemos tener 3.000 aficionados fijos, pero si queremos tener un equipo que aspire a consolidarse en la ACB si ascendemos necesitamos un Centro de Tecnificación lleno.

-¿Siente nostalgia a ver a jugadores ex lucentinos como Prigioni o Calderón triunfando en grandes equipos y en grandes ligas?

-Siento envidia sana al no poder enfrentarnos a ellos en ACB o que alguno estuviera con nosotros. Para Alicante debe ser un orgullo que hayan pasado jugadores tan importantes y además que guarden tan buen recuerdo de la ciudad y de la afición.

-¿Qué le parece que José Luis Sáez siga al frente de la Federación Española de Baloncesto?

-Está haciendo un buen trabajo, se ha centrado en traer eventos como el Eurobasket y seguro que traerá el Mundial del 2014.