Estamos en tiempo de planificación interna en el club. Patrocinadores, nuevo entrenador, estructura y coordinación de la base... Son tiempos de pocas noticias y se me ha ocurrido sacar un tema a debate para pulsar la opinión de los lectores del blog. Se trata del horario de los partidos del equipo.
El Lucentum lleva jugando en las mañanas de los domingos desde hace muchas temporadas. Es cierto que en ese horario se han conseguido grandes afluencias de público en otras épocas pero también es cierto de que en partidos de horario de tarde-noche de viernes o de sábado también se consiguieron buenas entradas, basta ver el último partido de playoff de esta misma temporada donde asistieron un martes por la noche unas 3000 personas al partido.
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Es un tema delicado. Cualquier cambio generará beneficiados y perjudicados. Si miramos al resto de clubes, en LEB Oro y LEB Plata se suele jugar en horario de viernes o sábado por la tarde. Está claro que hay muchos factores en cada ciudad que influyen en los horarios y es un análisis complejo, pero también es cierto que a lo mejor hay abrir la mente y plantearnos si un cambio podía ser beneficioso a un nivel general. Muchas veces se ha tenido cuidado con no coincidir con el Hércules, pero realmente a día de hoy no creo que coincidir con el fútbol sea la mayor limitación de la asistencia a las gradas. Además, el horario del futbol es algo cada vez menos previsible, viendo el tema televisivo.
Viendo la asistencia real a los partidos del Lucentum en los últimos años en LEB Plata lo que está claro es que el margen de mejora existe. Los partidos de domingos por la mañana ofrecen ventaja en teoría para que asistan familias y niños, pero si miramos a las gradas lo cierto es que la edad media no es precisamente baja ni se ven los domingos gran cantidad de niños. Además, más bien al contrario ya que ese horario matutino de domingo coincide con muchos partidos de categorías inferiores de baloncesto, impidiendo a jugadores y familias de la base asistir. Por no sumar la creciente cantidad de eventos deportivos y culturales que suelen haber los domingos por la mañana y que suelen 'desbancar' a los partidos del Lucentum como primera elección familiar para un plan dominguero.
Cambiar a viernes supone irnos a un horario más nocturno y pasar a sábado permite un horario más asequible también para público familiar (18:00 o 19:00 de la tarde). Cuando en épocas ACB se planteaba este debate siempre salía el tema de que Alicante es una ciudad comercial y en esos horarios mucha gente no puede asistir a los partidos por incompatibilidad con sus trabajos.
Una última opción que se puede plantear es domingo por la tarde, que permitiría no perjudicar a esas personas que trabajan en horario comercial aunque ya nos lleva los partidos al tramo final del fin de semana.
Es difícil valorar el efecto de un cambio de este calibre en la asistencia a las gradas. Como decíamos antes, es un tema que genera beneficiados y perjudicados y eso siempre es una decisión difícil de tomar. Este artículo solo pretende pulsar la opinión general sobre este tema.
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