Tiempo de despachos para la Fundación Lucentum

Hace casi dos meses que terminó la temporada para el Lucentum y el club sigue enfrascado en trabajos de puertas adentro. Tras la salida de Zapata y la incorporación de Rejón como Director Deportivo el club apenas ha generado información sobre el proyecto de la próxima temporada.

Es lo que tienen las Ligas LEB. Hasta mediados o finales de julio no se sabrá cuántos equipos habrá en la liga y eso condiciona muchas cosas. Desde la composición de la plantilla hasta la planificación de la campaña de abonos.

Salvo sorpresa mayúscula no se esperan grandes novedades competitivas y el Lucentum seguirá en una LEB Plata en la que habrá que ver qué equipos apuestan fuerte por estar arriba. Granada volverá a ser el rival a batir y, al igual que nosotros, ha aprendido este año que con el nombre no se asciende. 

El club tiene mucho trabajo que hacer:

-Consolidar la estructura del club: Tras la salida de Zapata, que ejercía también la coordinación de la base, el club tiene que volver a dotar de una estructura a toda la base. Mantener una base coherente y con una línea de trabajo seria es importante para que el club crezca. Sería bonito crear en esa base un sentimiento de pertenencia al club que se pudiera traducir en que en los partidos del primer equipo se hiciera presente ese apoyo en las gradas, de jugadores y familiares de la base.

-Reforzar los patrocinios: El club trabaja en la continuidad de HLA Grupo Hospitalario y Meridiano Seguros, dos pilares que son un lujo para un club en esta categoría. Esperemos que club y empresas consigan encontrar un punto común que permita que los planes estratégicos de las dos partes puedan seguir creciendo y que la relación sea positiva para ambos.

-Entrenador y plantilla: Desde la nueva dirección deportiva de Guillermo Rejón se tiene la difícil tarea de generar un equipo que pueda traer ilusión a las gradas. Será la cuarta temporada en LEB Plata y no es algo fácil despertar ilusión en esta categoría. Acertar con el entrenador es importante, pero también lo será acertar con una plantilla que transmita una implicación y un compromiso con el proyecto que se perciba en la grada. Uno puede ver muchos vídeos antes de fichar pero hay muchos factores más a la hora de decidirse y no es nada fácil. 

En los dos últimos años el club ha presumido de tener una plantilla en la que la rotación daba una plantilla amplia y de calidad, pero a lo mejor resulta más interesante apostar por una plantilla con 7 jugadores referencia y 3 de complemento, algo que hemos visto en plantillas que han tenido más éxito deportivo. Hace pocas fechas, el entrenador de Covirán Granada iba también en esta línea a la hora de plantearse la planificación de la próxima temporada.

-Futuro e ilusión: La estructura de las ligas de basket en España está en proceso de cambio. El canon ACB está en proceso de reducción y las condiciones de acceso a la ACB podrían ser más acorde a la realidad a corto-medio plazo. Pero antes de todo eso es importante posicionarse bien y esta temporada puede ser clave para llegar a una LEB Oro que puede volver a ser una verdadera antesala de la élite a corto plazo. 

La ilusión en las gradas la tiene que generar un equipo que transmita. Algo de lo que hemos carecido en las dos últimas temporadas. No es solo el estar arriba en la tabla es tener la sensación de que vas al pabellón y ves a jugadores que te generan ilusión y que tienen complicidad con la grada. No se trata de marcadores altos o marcadores bajos se trata de intensidad en la cancha, de esfuerzo y de que el equipo enganche.

Todos sabemos que va a ser difícil llevar a más de 700 personas a las gradas, pero también sabemos que la afición al Lucentum sigue agazapada esperando el momento de poder volver a despertar, como vimos en el Playoff ante Valladolid. Sí, aquí funcionamos a base de golpes de efecto. Necesitamos una buena temporada y un éxito deportivo y entre todos tenemos que lucharlo.

Mientras tanto, a seguir esperando noticias deportivas de unas Ligas LEB que en estos meses desaparecen del mapa.