La Ley Concursal es una herramienta legal que han utilizado de manera creciente los clubes deportivos (S.A.D.) para reducir sus deudas acumuladas sin perder sus derechos deportivos ni sufrir descensos administrativos.
El Lucentum está en la fase más crítica del concurso voluntario de acreedores que solicitó. Tiene que superar varios informes desfavorables de los administradores concursales para poder llegar a presentar un convenio a los acreedores y poder así obtener su aprobación y poder aplicar el Plan de Viabilidad que tiene previsto el club para los próximos diez años.
Para superar este momento delicadísimo hace falta que se ingresen los famosos 700.000 euros de los que llevamos hablando varias semanas. Si no llegan, parece que el Lucentum se disolverá. Pero si llegan el club continuaría adelante con el procedimiento concursal y podría ver la luz al final del tunel, al igual que en su día hicieron Estudiantes, CB Valladolid o Joventut.
Buscando información he podido ver que el CB Valladolid consiguió reducir su deuda en 3.5 millones de euros (pasó de 7.4 millones a unos 4 millones de euros) y además consiguió un aplazamiento de hasta ocho años en los pagos.
El Joventut ha sido el último club en firmar un convenio con los acreedores y según algunos medios la reducción de la deuda ha sido brutal (de un 80% con los acreedores ordinarios) reduciéndose desde los 13.8 millones hasta unos 5 millones de euros y un aplazamiento de pagos de hasta seis años.
Alguna se vez se ha comentado que el Lucentum plantearía una quita de un 50% a los acreedores ordinarios (no se incluyen los acreedores privilegiados: Hacienda y Seguridad Social) y una espera de dos años para comenzar a pagar la deuda hasta en cinco años, con lo que el Lucentum podría reducir su deuda desde los 9 millones de euros en tres o cuatro millones de euros, a pagar en plazos.
Cada caso es distinto y no siempre son comparables. Los activos con los que cuenta cada club son distintos y también entra en juego la actitud de los acreedores hacia el concurso, pero lo que está claro es que parece que el "ahorro" de deuda sería mucho mayor si llegan esos 700.000 euros y el concurso sigue adelante. Ese tiene que ser el motivo que impulsa al Ayuntamiento (máximo accionista) a liderar la búsqueda de esos apoyos que, a la larga, resultarían en una menor deuda del club.
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