CBC Valladolid y Gipuzkoa Basket dejan en evidencia el acuerdo 'fake' de la FEB

El pasado viernes 8 de mayo la Comisión Delegada de la FEB adoptó un acuerdo para dar por concluída la temporada regular de la LEB Oro y fijar las condiciones en las que se disputará la Fase de Ascenso para decidir qué dos equipos lograrán el derecho a jugar la ACB la próxima temporada.

El aspecto clave de la decisión es el establecimiento del 25 de mayo como fecha límite para decidir si se puede jugar la fase de ascenso antes del 30 de junio. En caso contrario se indica que ascenderían Carramimbre CBC Valladolid y Delteco GBC.

Apenas han hecho falta unas horas para verificar que todo ese planteamiento no es más que un paripé, teniendo en cuenta que los dos equipos más directamente implicados (Valladolid y Guipúzcoa) ya dan casi por hecho que no se va a disputar esa fase de ascenso, con lo que todo el detalle del sistema de competición, sede, fecha... no es más que papel mojado.

El presidente del CBC Valladolid, Mike Hansen, apenas tardó tres horas en manifestar en Twitter que da casi por hecho que no se jugará y que Valladolid logrará el ascenso:

9️⃣9️⃣%⛔️🏀🐿

— Mike Hansen (@Hansen4Three) May 8, 2020

El director general del club pucelana también se manifestaba sobre la decisión en Marca, indicando que "diferentes presiones por parte de algunos clubes han llevado a la FEB a tomar una decisión que llama la atención y que no tiene mucho sentido". Hérnández se manifestaba en la línea de su presidente: "reanudar la competición, tal y como está la situación, resulta al 99% inviable".

Por si fuera poco, El Mundo Valladolid publica hoy que el club pucelano tiene en manos de sus asesores jurídicos la situación. El diario apunta que dicha asesoría tiene ya sobre la mesa los argumenos para rebatir un posible regreso a la competición que estaría totalmente desvirtuado por un asunto económico y de logística.

El otro equipo implicado es el Delteco GBC, y su presidente Nacho Núñez declara en El Mundo Deportivo que "el 25 de mayo la federación tiene que decidir dónde se jugaría, en qué condiciones, garantizar que eso se va a poder llevar a cabo y que se den las medidas de prevención y todo eso se me antoja muy difícil”.

Teniendo en cuenta en primer lugar que la situación a nivel sanitario hace casi imposible que el próximo día 25 de mayo se pueda tener certeza que permita disputar esa fase de ascenso en condiciones de seguridad y teniendo en cuenta que los dos equipos que verían perjudicados sus intereses están posicionados en que no se vaya a disputar, en una posición de respetable defensa de sus intereses, queda totalmente desacreditada la resolución de la Comisión Delegada.

Quizá haya una justificación que se nos escape para comprender el acuerdo adoptado. Tal vez sea una estrategia para defender los ascensos de Valladolid y GBC ante posibles demandas de la ACB. 

Después de dos meses con la competición parada y múltiples reuniones, se ha llegado a una propuesta sin visos de poderse hacer efectiva. 

Valladolid y GBC han sido los dos primeros clasificados en el momento en que se suspendió la competición. Virtualmente ya han logrado el ascenso y es de esperar que el próximo día 25 se haga oficial.

A partir de ahí, empezará otra lucha para ellos. Tendrán que pelear con la ACB para poder jugar allí la próxima temporada. Seguramente encontrarán muchas resistencias y se mirará con lupa cualquier detalle con la intención de dejarles fuera. No es descartable incluso que puedan haber negociaciones futuras para establecer compensaciones económicas desde la ACB a los clubes que ascienden a cambio de que no lo hagan efectivo. Pero ese culebrón será ya para el mes de junio-julio.

Ojalá tengan suerte en ese proceso y puedan jugar en ACB en una temporada que se presenta cargada de incertidumbres, con canchas vacías, con una importante crisis económica y con múltiples incertezas.