El partido del domingo nos ofrece una situación privilegiada. Poder optar a los Playoff sabiendo que dependemos de nuestra propia victoria y ante nuestra afición creo que es un bonito final para una temporada mágica.
Desde aquel cuarto partido de Playoff en 2005 ante Unicaja que no nos jugábamos tanto en un último partido en el Centro de Tecnificación. Lo que nos jugamos este domingo sólo se puede comparar a ese día y al histórico 2 de junio de 2000, día del primer ascenso a la ACB.
En 2000-01 nos jugamos el descenso en Gijón en la última jornada
En 2001-02 ascendimos en casa ante Ourense, pero nos quedaba otro cartucho.
En 2002-03 nos jugamos entrar en Copa en el Palau y nos jugamos los Playoff en Sevilla
En 2003-04 conseguimos la salvación en Málaga, aunque es cierto que cada partido en casa era una final.
En 2006-07 descendimos en Las Palmas
En 2008-09 ascendimos en Fuenlabrada
Será la tercera vez en nuestra historia en la que nos juguemos tanto en un último partido decisivo en nuestra cancha. Ante Unicaja no pudimos llegar a las semifinales. Toca reeditar una victoria épica como la del día más grande de nuestra historia, hay que sacar el espíritu de aquel 2 de junio.
Como no podía ser de otra forma, la mala fortuna nos deja al equipo mermado para este día clave. Ellis es baja confirmada y la participación del resto de jugadores tocados dependerá de la evolución durante estos dos días, de la voluntad de los propios jugadores por hacer un esfuerzo final y de su cuerpo responde.
En una jornada final con tantas cosas en juego es difícil encontrar a equipos que realmente no vayan a influir con su resultado en alguna de las cosas que están por definir. Sin ir más lejos tenemos a nuestro rival, al Fuenlabrada, con la permanencia asegurada y con nada en juego más allá del orgullo de dar una buena imagen y de competir hasta el último minuto.
Sin embargo, una victoria de Fuenla serviría en bandeja el Playoff a Unicaja, siempre que los malagueños no fallen ante Banca Civica. Esa misma posible victoria de Fuenla podría allanar la salvación a Estudiantes obligando a Murcia a vencer en el Palacio de los Deportes de Madrid. No podemos saber si estos equipos "incentivarán" a Fuenlabrada para que aumente su nivel competitivo y su motivación, pero siempre es algo que planea en las últimas jornadas de competición.
Pero por encima de cualquier tipo de interés cruzado lo que tenemos que saber es que jugaremos en casa, con el Centro de Tecnificación rozando un lleno absoluto y con una afición volcada con unos jugadores que nos han hecho disfrutar del baloncesto como hacía tiempo que no lo hacíamos.
Me da pena pensar que podemos estar hablando ya del último partido de la temporada. El baloncesto es "cruel", porque el parón veraniego es eterno, casi cinco meses sin Lucentum parecen demasiado tiempo, así que vamos a disfrutar del momento, vamos a soñar hasta el final.
Hubo un tiempo en que el Centro de Tecnificación se hacía inexpugnable en los momentos vitales de nuestro equipo, y el del domingo lo es. El aliento del público y la presión al rival tiene que ser constante desde el minuto 1. Sólo así podremos compensar nuestras carencias.
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