"El HLA Alicante no da señales de vida". Así rezaba el titular del Diario Información tras la derrota sufrida en Granada el pasado domingo. El equipo sigue sumido en una depresión. Sin buen juego, con falta de confianza, con muchos lesionados y con falta de los recursos y la confianza necesaria para hacer frente a las adversidades.
Con este panorama y con una jornada en la que todos los rivales por el Playoff han ganado, las opciones de entrar en las eliminatorias de ascenso se han alejado.
La situación actual del equipo convierte el partido del próximo sábado en un partido que tiene pinta de 'final', aunque se trata de una final en la que el equipo tiene mucho que perder y relativamente poco que ganar.
Si el HLA Alicante gana, lo único que consigue es mantener vivas sus opciones y gana una 'vida extra' para seguir disputando finales para apurar opciones de llegar a Playoff, en función de lo que hagan los rivales. Pero si el equipo alicantino pierde y vuelve a confirmar las malas sensaciones que ofrece en los últimos partidos la derrota será doble. Primero porque el equipo diría adiós al objetivo de la temporada y segundo, podemos asistir en primera persona al final de un ciclo (que ha durado solo una temporada).
El rival será un Leyma Coruña que viene de ganar con claridad a Movistar Estudiantes y que viene a lograr un triunfo que le pueda dar opciones de tener ventaja de cancha en Playoff.
Lo cierto es que en el ambiente la confianza en que el equipo pueda llegar a Playoff se diluye cada jornada que pasa, y aunque las lesiones están terminando de cavar la tumba del equipo, la realidad es que hemos vivido la temporada más gris del equipo en mucho tiempo. Con un proyecto que tenía nombres para ilusionar, pero donde no se ha conseguido nunca conjugar un equipo que transmita sensaciones más allá de latigazos puntuales o días de inspiración aislados y sin continuidad.
Ojalá el equipo nos alargue un poco más la esperanza este sábado. Eso ya está en sus manos, porque son ellos los que tienen que demostrar el carácter necesario que haga que la grada crea en ellos.
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