De la LEB Oro a la Primera FEB, un cambio que se queda todavía en un anuncio

Se cumple casi un mes desde que la FEB anunció la nueva denominación de las competiciones masculinas para esta temporada. Se anunciaba la creación de la Primera FEB, Segunda FEB y Tercera FEB para reemplazar a las actuales LEB Oro, LEB Plata y Liga EBA.

🚨 OFICIAL | Nueva denominación para las competiciones masculinas de la #FEB

🎙️ @eaguilar10: "Queríamos dar una nueva imagen a las ligas y hemos decidido cambiar el logo y la denominación" 🏀#SomosEquipo pic.twitter.com/2L3ligDTO2

— Baloncesto España (@BaloncestoESP) May 24, 2024

Afrontar un cambio de este calado cuando la LEB Oro está en un momento de gran crecimiento a todos los niveles y cuando las marcas LEB Oro, LEB Plata o Liga EBA están consolidadas debería ser una decisión bien pensada y que, bien ejecutada y acompañada de medidas complementarias, pueda servir para dinamizar el crecimiento y el impacto de las ligas FEB.

La situación es que desde que el día 24 de mayo se hiciera el anuncio oficial del cambio de denominaciones no se ha visto ninguna otra medida por parte de la Federación. No se ha cambiado las denominaciones en la web oficial, las redes sociales de la FEB siguen hablando de LEB Oro o LEB Plata, no se ha implementado el cambio de imagen en ningún lugar, mientras que ya los equipos andan planificando y anunciando los primeros fichajes para una liga que cambia de nombre, aunque no se vea reflejado en casi ningún sitio. 

Es evidente que un cambio tan radical conllevará un tiempo de transición. Pero teniendo en cuenta que un movimiento de esta envergadura ya debe tener mucho trabajo detrás en cuanto al diseño de la nueva imagen, se debería de haber acompañado con un lanzamiento en bloque del cambio de imagen para que tanto los aficionados como los medios de comunicación empiecen a tener claro como referirse a las nuevas competiciones y para que esa nueva imagen que se pretende generar vaya calando en todo lo que rodea a las competiciones (medios, redes sociales, clubes, patrocinadores, aficionados...).

También queda por ver si el cambio que propone la FEB va a ir más allá de unos nuevos logotipos que veremos en los parqués o en los escudos de las camisetas o si se va a ver acompañado por medidas e inversiones en mejoras de la comunicación desde la propia federación, con la incorporación de más personal que refuerce la generación de contenidos de calidad desde la web y las redes sociales de la FEB. 

La LEB Oro como buque insignia, y la LEB Plata y la Liga EBA, necesitan mejoras y ojalá la Federación apueste, de una vez por todas, de forma decidida por sus competiciones y sepa hacer que el buen momento de crecimiento que se vive se traduzca en una competición que ofrezca mayor visibilidad, calidad y capacidad de generar recursos para los clubes que participan.

Ojalá dentro de poco veamos una apuesta importante a todos los niveles para que el cambio de denominación cale y tenga impacto, porque de lo contrario puede acabar la cosa como lo del cambio de nombre de Twitter, que nadie la llama ahora X.