El partido fue una auténtica exhibición ofensiva del Lucentum, que logró su récord de anotación en ACB con 109 puntos con Quincy Lewis como principal anotador con 24 puntos pero acompañado muy bien por Oriol (19), De Miguel (14), Héctor (14) y Larry (14), además todos los jugadores consiguieron anotar.
El partido estuvo dominado de principio a fin por el Lucentum, pero fue en el tercer cuarto dond un parcial de 3-18 rompió definitivamente el partido colocando el 56-77 en el marcador. El parcial de la segunda mitad fue un tremendo 40-62.
Al final el marcador fue un demoledor 81-109 que disparaba la ilusión en la afición alicantina.
El equipo ya empezaba a dar una sensación de poderío importante y el sueño de alcanzar la Copa del Rey parecía cobrar visos de realidad, aunque todavía era pronto para lanzar las campanas al vuelo.
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